PASTEL FRÍO DE LIMÓN

Como ya he adelantado este medio día, la semana pasada la Cazueli se fue de BBQ para despedir un curso más con los compis de #fcom33pm. ¡Sopresa! Si, se ha acabado 3º y apenas nos hemos dado cuenta, pero bueno... vamos a lo que vamos no vaya a ser que nos pongamos sentimentales.

Como en toda BBQ, no faltaron los botellines fresquitos de cerveza y la carne de todas las formas y colores... pero claro, eso tampoco es que tenga mucha ciencia, además faltaba algo "made in Cazueli" para que el día fuese redondo. 

Armándome de valor e investigando un poco me hice con un par de recetas y como viene siendo ya costumbre, el día anterior innové y recé un poco para que saliese de esa mezcla algo bueno. Se ve que lo hice con ganas pues a la hora de presentar aquella tarta en sociedad, no tardó más de 5 minutos en ser devorada por un grupo de publicistas con bastante ansia. 

Para ellos va dedicada la receta de hoy, para que se repitan más días como aquel y para que se coman todas las recetas con las mismas ansias ♥.

Dicho todo esto, os dejo la receta de una tarta que está de escándalo y que no le tiene nada que envidiar a la adorada y venerada tarta fría de oreo. La opción perfecta para reuniones de grandes comilonas ya que no es nada pesada, invita a repetir hasta las barrigas más llenas.

INGREDIENTES (6 personas)

- 3 limones 

- 1 lata pequeña de leche condensada

- 200 ml de nata líquida

- 1 paquete de galletas (variará según el molde)

- 100 gr de margarina

- Caramelo líquido

- 1 sobre de gelatina en polvo o 5 láminas.

- 1 vaso de agua (para la gelatina)

PASO A PASO 

1. Triturar las galletas (como enseñamos a hacerlo en el truco) y mezclar con la mantequilla derretida hasta que quede una masa compacta. Extender en el molde y meter en el congelador.

2.  Exprimir los limones.

3.  Preparar la gelatina. Nosotras hemos optado por la gelatina en lámina sin sabor. Poner las láminas 5 minutos en agua fría. Añadir a cazo con el agua caliente hasta que se disuelvan completamente. 

4. Mezclar todos los ingredientes restantes (la nata, la leche condensada, el zumo de limón y el agua con gelatina). Verter en el molde y dejar enfriar en la nevera unas dos horas como mínimo. Cuando esté fría, poner el caramelo por encima para adornar.

Como podéis ver, no es la tarta con la mejor pinta del mundo por problemas técnicos pero si la más rica y mejor compartida del verano de momento :) Espero que más de uno se anime y triunfe en las reuniones veraniegas igual o más de lo que lo hizo esta en su día. 

 

Consejo Cazueli. Si queréis darle más sabor todavía porque los limones no son demasiado "potentes" probad a utilizar gelatina en polvo sabor limón, ya veréis como multiplica el sabor por 10.